¡Quiero ya mismo tu fórmula para llegar a los 90!
Conservas los ojos inquietos de un niño
que recién se asoma al mundo.
A la vez,
te has nutrido de la sabiduría que da la experiencia
a los que saben vivir.
Tengo la suerte de disfrutarte
e intento aprender cada día de ti.
¡Felicidades!

—

Junto a ti y por ti guardo mis mejores recuerdos
que me ayudan a enfrentar los problemas
y a resolverlos, a pesar de todo.
Eres mi ejemplo y mi guía
por ello agradezco poder brindar
una vez más por tu salud.
Por tu inteligencia y tu don de gente,
por tu horizonte sin límites,
levanto la copa con alegría.
¡Feliz cumpleaños!

—
Alquien dijo por ahí que envejecer
sigue siendo el único método para vivir muchos años.
Pero tu no solo has vivido nueve décadas
sino que has vivido con toda la intensidad
y el amor.
¡Ojalá pudiera llegar como tú
a esta instancia de la vida!
¡Muchas felicidades!

—

A pedido de la Aurora
el dios Zeus concedió la inmortalidad a Tithonos
aunque no lo favoreció con la eterna juventud.
¿Para qué enamorarse de la eternidad
si se puede vivir cada día con pasión?
La verdadera gloria es dejar una huella
que otro quiera seguir.
Te deseo en tu día
que celebres una vez más la vida
que sigas trazando tu hermoso camino para nada efímero,
camino que anhelo seguir con todo mi corazón.
¡Te doy las gracias por existir!

—

Mientras la vida moderna corre a ritmo veloz
tu parecieras hacer un alto en el camino
contemplar sin prisa el vuelo de un pájaro
apretar la mano de tu nieto
y demorarte en contarle una historia.
¡Así vale la pena llegar a los 90!
¡Te deseo toda la felicidad del mundo,
hoy y siempre!

—
Quiero expresarte en tu día toda mi admiración
por ser una persona tan maravillosa.
Cumplir años puede verse como algo inevitable.
O puede verse, como en tu caso,
como un acontecimiento dichoso
por haberte sabido rodear de amor.
Anhelo que cumplas muchos años más
y que lo hermoso de la vida
no deje de sorprenderte como hasta hoy.
¡Te quiero mucho y te deseo
un cumpleaños muy feliz!

—

Has desafiado cada día
como un verdadero escalador
que ansía alcanzar la cima
y aun guardar aliento para seguir.
Aunque tu cúspide nunca es un punto culminante.
Tu cúspide es abierta a las sorpresas
y a los desafíos
para permitir que avances
con dicha en tu camino.
¡Felicidades en tu día!

—

¡Eres increíble!
Es envidiable lo lejos que has llegado en la vida,
la cantidad de cosas que has logrado
y la gran cantidad de energía que aún te queda.
Muchos necesitarían más de una vida para conseguir
empezar la mitad de todo lo que tú has acabado.
¡No he visto a nadie lograr tantos objetivos como tú!
Disfruta mucho de este cumpleaños
te aseguro que toda la familia estaremos a tu lado
para hacer de este día uno de los buenos.

—

Una vez me dijeron que mi abuela había vivido mucho.
No lo creía, pensaba que era imposible que una persona sola
consiguiera tantas cosas y luchara tanto.
Pero con el paso de los años he podido conocerte bien
y a día de hoy lo aseguro:
¡has logrado todo cuanto has querido!
Te felicito por ello y por llegar a tus 90 años
con tantas ganas de vivir y tan buen humor.

—

Deberías escribir un libro o, mejor,
alguien debería escribir un libro sobre ti.
Me encantaría poder llegar a tus 90 años
y decir que he experimentado tanto,
que he sufrido, llorado y reído tanto.
Eres un referente a seguir, mantén siempre esa fortaleza.
¡Feliz cumpleaños!

—

Si no te importa, creo que este año no pondremos
todas las velas en la tarta.
¡Son demasiadas!
Casi tantas como experiencias llevas acumuladas
y vidas llevas en tu interior.
Se admira mucho tu paciencia y coraje
y en la familia todos te queremos con locura.
¡Muchas felicidades!

—

Fui a comprar velas para colocar en tu pastel
pero solo conseguí reunir la mitad de tu edad.
¡Aunque tendrías energía suficiente
para apagar 90 velas o más!
A pesar de todo lo que has pasado en la vida
siempre te has mantenido fuerte y firme
y eso es algo digno de admirar.
¡Feliz 90 aniversario, abuela!

—

Como suele decirse:
¡nos vas a enterrar a todos!
Tus ganas de vivir son contagiosas
y eso lo nota cualquiera que pase
apenas un pequeño rato contigo.
Te quiero una enormidad,
¡muchas felicidades!

—

Hemos vivido momentos buenos y malos,
hemos llorado y reído
pero lo importante es que todo eso
lo hemos superado y lo hemos hecho juntos.
Brindemos por tus 90 años de sabiduría
y amor incondicional a toda la familia.

—

No eres buena con las nuevas tecnologías
y casi siempre confundes nuestros nombres,
¡pero tus cocidos enamorarían a mil hombres!
En un día tan especial como hoy deseamos
que nunca pierdas ese carisma y esa vitalidad.
¡Muchas felicidades!

—

Con el paso de los años la familia ha ido creciendo
y tú nos has visto a todos ir perdiendo los pañales.
Eres el alma de la fiesta, no lo olvides nunca.
¡Feliz 90 cumpleaños!